Enfermedades valvulares: causas y síntomas

  • Las enfermedades valvulares cardíacas tienen un significativo aumento de la prevalencia con la edad.
  • Cambios en la alimentación, actividad física regular y control de los hábitos tabáquicos reducen el riesgo de esta enfermedad.
enfermedades valvulares

Las enfermedades valvulares o valvulopatías son un grupo de patologías que afectan a los mecanismos de bombeo naturales del corazón, conocidos como válvulas cardíacas. Se caracterizan por la acumulación de placa en las válvulas, que hace que se cierren (estenosis) o se abran demasiado (insuficiencia), influyendo en el funcionamiento del corazón. 

¿Para qué sirven las válvulas cardíacas? El corazón está formado por cuatro cámaras que funcionan juntas para bombear sangre alrededor de todo el cuerpo. Las dos cámaras superiores se llaman aurículas, mientras que las dos inferiores se llaman ventrículos. Existen también cuatro válvulas cardíacas del corazón, que separan las aurículas de los ventrículos (mitral y tricúspide), y los ventrículos de la arteria aorta (válvula aorta) y la arteria pulmonar (válvula pulmonar). Son como puertas que se abren y cierran. El correcto funcionamiento de las válvulas cardíacas permite el flujo de la sangre, lo que impide que fluya hacia atrás.

Enfermedad en adultos y en niños

Las enfermedades valvulares cardíacas tienen un significativo aumento de la prevalencia con la edad. En adultos, la proporción de personas con este trastorno cardíaco es cada vez mayor. Por el contrario, los niños no solo tienen una incidencia significativamente menor, sino que también experimentan una variedad de síntomas mucho más leves. 

Enfermedades valvulares en adultos

Uno de los factores que más influyen para el desarrollo de enfermedad de las válvulas cardíacas es el envejecimiento del corazón. A medida que el tiempo pasa, los tejidos cardíacos se deterioran, especialmente los vasos sanguíneos y las válvulas. Esto se debe a una serie de factores como la edad, el estilo de vida y la genética. Con la edad, las válvulas del corazón se vuelven rígidas y no pueden controlar la cantidad de sangre que entra y sale del corazón. Esto hace que el flujo de la sangre sea ineficiente, lo cual conduce a enfermedades importantes como la insuficiencia cardíaca, la arritmia y el infarto de miocardio.

Enfermedades valvulares en niños

Los niños y adolescentes son menos propensos a desarrollar una enfermedad valvular cardíaca, ya que sus válvulas cardíacas todavía son flexibles y permiten el paso adecuado de la sangre. Así, enfermedades graves como la insuficiencia cardíaca o la arritmia son menos comunes en edades tempranas. No obstante, es muy importante realizar diagnósticos precoces para identificar el desarrollo de alguna patología antes de que se agrave.

Tipos de enfermedades valvulares

Las valvulopatías son enfermedades en el corazón que afectan los tejidos que componen las válvulas del corazón. Estas enfermedades se clasifican como insuficiencia o estenosis

  • Insuficiencia valvular. Las válvulas no se cierran de forma adecuada, lo que provoca la regurgitación de la sangre, es decir que la sangre circule en sentido contrario. 
  • Estenosis valvular. Se refiere a una rigidez o engrosamiento en los velos de la válvula, lo que reduce el flujo de sangre a través de ésta. 

Así, las lesiones valvulares cardíacas pueden ser: estenosis o insuficiencia aórtica, estenosis o insuficiencia mitral, estenosis o insuficiencia pulmonar y estenosis o insuficiencia tricúspidea.

Además de estas enfermedades, existe la atresia valvular, una enfermedad congénita donde la válvula no se forma y hay una obstrucción que impide la circulación normal de sangre entre los compartimentos del corazón.

Aproximadamente el 4% de personas mayores de 70 años tiene alguna forma de estenosis aórtica, que hace que las válvulas del corazón no se abran. La insuficiencia mitral, donde las válvulas no se cierran de forma adecuada, afecta al 1,6% de la población, y aumenta con la edad. Menos frecuentes son la insuficiencia tricúspide y la aórtica, con una prevalencia del 0,8% y el 0,5%, respectivamente. Mientras que la estenosis mitral es la enfermedad menos común, con una prevalencia del 0,1%.

Causas

Según sea el origen, las enfermedades valvulares cardíacas se pueden dividir en diferentes tipos: adquiridas y congénitas

Enfermedades valvulares adquiridas

Son aquellas que desarrollan los pacientes durante su vida adulta. La causa más frecuente es la degenerativa, relacionada con el paso de los años y la acumulación de cambios en el tejido de las válvulas. Entre los factores que más influyen esta patología está la aterosclerosis, que causa la acumulación de placas en las arterias. Otras enfermedades comunes que pueden contribuir a la aparición de valvulopatías adquiridas incluyen: 

  • Prolapso de la válvula mitral. 
  • Endocarditis bacteriana. 
  • Estenosis mitral idiopática. 
  • Enfermedad aórtica reumática.
  • Estenosis Aórtica.

Enfermedades valvulares congénitas

Existen malformaciones congénitas de la válvula cardíaca, que aparecen desde el nacimiento. Las valvulopatías hereditarias se transmiten de padres a hijos y pueden estar causadas por diversos factores genéticos, como el síndrome de Marfan, el síndrome de Noonan y la miocardiopatía hipertrófica. Estas enfermedades valvulares cardíacas congénitas son responsables del 40-50% de las enfermedades del sistema cardiovascular.

Factores de riesgo de EV

La ateroesclerosis, la diabetes de tipo 2, la hipertensión arterial, la enfermedad crónica del hígado, los trastornos metabólicos y los factores genéticos son algunos de los factores de riesgo implicados en su desarrollo. 

La prevención de la enfermedad se centra en la identificación temprana de los factores de riesgo, que aumenta en personas mayores de 65 años, debido al envejecimiento de la válvula mitral con cambios degenerativos. Igualmente, la diabetes mellitus ha disparado recientemente el riesgo de aparición de enfermedad valvular, especialmente de ventrículo izquierdo y de la válvula aórtica.

Junto con los cambios relacionados con la edad, los hábitos alimenticios inadecuados, las enfermedades crónicas o la obesidad

 están entre los principales factores de riesgo. 

Por otro lado, las patologías metabólicas, la disfunción renal y los trastornos hormonales también se consideran factores de riesgo para la aparición de enfermedades valvulares cardíacas. Su correcto manejo también puede minimizar el riesgo. Los cambios en los criterios de alimentación, además de la actividad física regular y el control de los hábitos tabáquicos, contribuyen a una reducción sustancial en la presencia de la aparición de esta enfermedad. 

Finalmente, los factores genéticos han sido adoptados cada vez en mayor medida como un factor de riesgo para la aparición de enfermedad valvular. 

Síntomas de las enfermedades de las válvulas cardíacas 

Las enfermedades valvulares cardíacas pueden provocar dificultades en el funcionamiento normal del corazón. Lo síntomas de los problemas de las válvulas del corazón incluyen: 

  • Falta de energía, agotamiento o fatiga
  • Taquicardia. 
  • Disminución de la presión arterial. 
  • Dificultad para respirar o falta de aliento.  
  • Tos. 
  • Sensación de palpitaciones.
  • Dolor en el pecho y/o mareos.

Si no se trata, estas afecciones pueden llevar a la insuficiencia cardíaca, ataque al corazón o accidente cerebrovascular

Diagnóstico

En algunos casos, el diagnóstico temprano se puede confirmar por una ecocardiografía simple. Esta prueba utiliza imágenes de ultrasonido para mostrar la anatomía del corazón y las válvulas cardíacas. Además, otras pruebas que se pueden utilizar para diagnosticar las enfermedades valvulares son: 

  • Angiografía cardíaca. 
  • Radiografía. 
  • Tomografía computarizada (TC). 
  • Electrocardiograma (ECG). 
  • Cateterismo. 

Enfermedad de las válvulas cardíacas: tratamiento 

Existen diferentes tratamientos disponibles, en función del tipo de enfermedad, la edad del paciente, el estado general de salud y la gravedad de los síntomas. 

Una de las principales formas de tratar esta afección cardiaca es mediante cambios en el estilo de vida, como una alimentación saludable y ejercicio, controlando los factores de riesgo y moderando el consumo de sal. 

 Para ralentizar la enfermedad se recurre al uso de fármacos, con el fin de regular la presión arterial y la frecuencia cardíaca. Entre los medicamentos más utilizados están los diuréticos, los betabloqueantes, los anticoagulantes, los bloqueadores beta, los antagonistas de los canales de calcio y los vasodilatadores. 

Por otra parte, el tratamiento quirúrgico es la única opción para algunas personas. La cirugía de la válvula es una buena técnica para mejorar los síntomas y tratar la enfermedad de forma eficaz. Existen diferentes procedimientos quirúrgicos, aunque siempre se intenta reparar las válvulas antes que reemplazarlas. No obstante, cuando no es posible su reparación se reemplazan las válvulas cardíacas y se colocan prótesis, que pueden ser biológicas, mecánicas, sin sutura, sin soporte u homoinjertos.  

Las decisiones sobre el tratamiento quirúrgico se basan principalmente en la gravedad de la enfermedad, el estado del paciente y los riesgos de la cirugía. 

Además del tratamiento farmacológico y quirúrgico, se han utilizado a lo largo de los años diferentes técnicas no invasivas para mejorar los síntomas, como la terapia de respiración, la fisioterapia y la rehabilitación cardiaca. Se usan para ayudar a mejorar la salud del paciente y reducir los síntomas. 

Otras opciones terapéuticas para tratar las enfermedades valvulares cardíacas incluyen cateterismo, cirugía y tratamiento con dispositivos. Además, algunos pacientes pueden necesitar un trasplante de válvula, en el que se extrae la válvula enferma y se sustituye por una válvula artificial o una válvula tomada de un donante. 

Seguimiento tras la intervención

Los pacientes con EV deben tener una atención médica regular para controlar y tratar cualquier complicación. Esto puede incluir exámenes de ultrasonido para medir el efecto posterior a la cirugía, evaluación anual de los síntomas para detectar cualquier nuevo dolor o malestar, y una evaluación si se considera un implante de marcapasos.

Las enfermedades valvulares cardíacas son una condición grave, por lo que los pacientes que se diagnostican precozmente tienen mayores posibilidades de recibir tratamientos eficaces y, en algunos casos, a recuperarse por completo. Esto demuestra la importancia de hacerse chequeos regulares con un profesional de la salud para detectar cualquier condición cardíaca y recibir tratamiento temprano.

Si tienes alguno de los síntomas de cardiopatía valvular, como falta de aire al realizar actividades o dolor en el pecho, es importante que acuda al cardiólogo para un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado. En SaludOnNet contamos con especialistas dispuestos a ayudarte en lo que necesites, sin esperas y a precios razonables. Ahora puedes comprar una consulta con un cardiólogo desde 26 euros

Servicios médicos relacionados

Artículos relacionados

¿Te has quedado con dudas?

Pregunta a los mejores especialistas médicos

Y tú, ¿qué opinas?

Te informamos de que solo utilizaremos tus datos para enviarte las actualizaciones que se produzcan en los comentarios de post.

Puedes ejercer tus derechos de acceso, rectificación, supresión, limitación u oposición al tratamiento de datos y portabilidad en materia de protección de datos en la dirección de correo electrónico dpo@saludonnet.com tal y como se detalla en la “Información Adicional”, que podrá ser consultada en https://www.saludonnet.com/politica-privacidad

Newsletter
¿Cómo quieres contactar con este especialista?

Esto se cerrará en 0 segundos