Qué son las cicatrices queloides y cómo quitarlas
- Aparecen por una producción de colágeno excesiva y desequilibrada, lo que lleva a la formación de una cicatriz abultada y elevada.
- Uno de los tratamientos más comunes para las cicatrices queloides es la terapia con corticosteroides.
Las cicatrices queloides son una forma de cicatrización anormal que puede afectar a cualquier persona, independientemente de su raza, edad o sexo. Aunque no suponen un problema de salud grave, pueden ser antiestéticas y causar molestias en algunas personas. Pueden formarse en cualquier parte del cuerpo, pero suelen ser más comunes en el cuello, el pecho, los hombros, los brazos y la espalda.
Formación de cicatrices queloides
Una cicatriz es el resultado del proceso de curación normal de la piel después de una lesión. Cuando la piel se corta o se lesiona de alguna manera, el cuerpo inmediatamente comienza a repararla. Durante este proceso, se forman nuevas células cutáneas para reemplazar las dañadas y se produce colágeno para fortalecer y unir las capas de la piel. En condiciones normales, el resultado es una cicatriz que desaparece gradualmente con el tiempo.
Sin embargo, en el caso de las cicatrices queloides, el proceso de cicatrización va más allá. La producción de colágeno se vuelve excesiva y desequilibrada, lo que lleva a la formación de una cicatriz abultada y elevada. Suelen ser de color rojo, rosa o marrón y pueden variar en tamaño y forma.
Una vez que comienza a formarse una cicatriz queloide, es posible que continúe creciendo más allá del límite de la herida original. Precisamente esta es una de las principales diferencias entre una cicatriz queloide y una cicatriz hipertrófica, que se limita al límite de la herida original. Otra es que los queloides no desaparecen con el tiempo y pueden crecer más allá del área original de la lesión.
Causas de esta cicatrización
La causa exacta de las cicatrices queloides aún se desconoce, pero se cree que pueden ser el resultado de una combinación de factores genéticos y ambientales. Algunas personas tienen una predisposición genética, mientras que otras pueden desarrollarlas debido a lesiones cutáneas significativas como quemaduras, cirugías, piercings o tatuajes. También se ha observado que las personas con piel oscura tienen un mayor riesgo de desarrollar cicatrices queloides.
Si bien las cicatrices queloides no representan un problema de salud grave, pueden causar molestias físicas y emocionales en algunas personas. La presencia de una cicatriz prominente y antiestética puede afectar la autoestima y la confianza de una persona, especialmente cuando se encuentra en una parte visible del cuerpo.
Signos y síntomas que producen los queloides
Las lesiones queloides pueden aparecer en el momento de la lesión o herida o desarrollarse algunos meses o años después. Se pueden volver muy incómodas, especialmente si interfieren con los movimientos cotidianos. Así, son preocupantes para quienes tienen una vida profesional o deportiva activa.
Los principales signos y síntomas son:
- Cicatrices anormalmente grandes y prominentes que se extienden aún más allá de los límites de la lesión original.
- Apariencia brillante y sin vello.
- Su tamaño, textura y color pueden variar notablemente.
- Pueden producir picazón y dolor en la zona afectada, así como una sensación de molestias o de presión.
Es importante tener en cuenta que no hay una cura cien por ciento efectiva para eliminar las cicatrices queloides. Sin embargo, hay algunos tratamientos disponibles para ayudar a reducir su apariencia.
Tratamiento de las cicatrices queloides
Afortunadamente, existen diversas opciones de tratamiento disponibles para eliminar o reducir el aspecto de las cicatrices queloides. Sin embargo, es importante tener en cuenta que no todos los tratamientos funcionan igual de bien en todas las personas y que los resultados pueden variar.
Tratamiento médicos
El tratamiento médico incluye diversas opciones. Las principales son:
- Corticoesteroides. Uno de los tratamientos más comunes para las cicatrices queloides es la terapia con corticosteroides. Este tratamiento implica inyectar esta medicación directamente en la cicatriz para reducir la inflamación y el exceso de producción de colágeno. Estas inyecciones contienen una mezcla de corticoides con lidocaína para reducir el dolor, y se deben inyectar en la zona afectada cada cuatro a seis semanas. A menudo, se requieren múltiples sesiones para obtener resultados visibles y el proceso puede ser lento. Sin embargo, en muchos casos, la terapia con corticosteroides ha demostrado ser eficaz para reducir el tamaño y la apariencia de las cicatrices queloides, a veces incluso eliminándolas por completo. Existen algunos efectos secundarios, incluida la pigmentación de la piel y una formación temporal de acné, que pueden ser desagradables, pero por lo general desaparecen después de un tiempo.
- Vendajes de presión. Otro enfoque de tratamiento es el uso de vendajes de presión. Ejercen presión constante sobre la cicatriz, lo que puede ayudar a aplanarla y suavizarla con el tiempo. Este método requiere el uso constante de vendajes o prendas de compresión durante varias semanas o meses, y los resultados pueden ser gradualmente visibles.
- Otras opciones de tratamiento. Además de estos tratamientos, existen otras opciones disponibles, como la crioterapia (congelación de la cicatriz), la terapia con láser, la radioterapia y la cirugía. Estos métodos pueden ser más invasivos y generar resultados mixtos en términos de la eliminación completa de la cicatriz. Por lo tanto, es importante discutir las diferentes opciones con un dermatólogo o cirujano plástico antes de tomar una decisión.
Remedios caseros
Además de los tratamientos médicos, también existen algunos remedios caseros y naturales que pueden ayudar a reducir la apariencia de las cicatrices queloides. Son productos que deben usar tanto durante el período de curación como en el mantenimiento posterior.
- Uso de aloe vera. Tiene propiedades antiinflamatorias y cicatrizantes. Aplicar gel de aloe vera fresco sobre la cicatriz varias veces al día puede ayudar a reducir la inflamación y promover la regeneración celular.
- Aceite de rosa mosqueta. Contiene ácidos grasos esenciales y antioxidantes que pueden ayudar a hidratar la piel y promover la regeneración celular.
- Masaje de la cicatriz con aceite de vitamina E. Se cree que este aceite ayuda a hidratar la piel y mejorar la circulación sanguínea, lo que puede contribuir a una mejor cicatrización.
Es importante tener en cuenta que estos remedios caseros pueden funcionar en algunos casos, pero no están respaldados por una amplia evidencia científica. Además, cada persona es única y lo que funciona para una persona puede no funcionar para otra. Por ese motivo siempre es recomendable consultar a un profesional de la salud antes de probar cualquier método de tratamiento.
Si tienes una cicatriz queloide es aconsejable que visites a un dermatólogo. En SaludOnNet contamos con especialistas dispuestos a ayudarte en lo que necesites, sin esperas y a precios muy asequibles. Ahora puedes comprar una consulta en dermatología desde 26 euros.
Te informamos de que solo utilizaremos tus datos para enviarte las actualizaciones que se produzcan en los comentarios de post.
Puedes ejercer tus derechos de acceso, rectificación, supresión, limitación u oposición al tratamiento de datos y portabilidad en materia de protección de datos en la dirección de correo electrónico dpo@saludonnet.com tal y como se detalla en la “Información Adicional”, que podrá ser consultada en https://www.saludonnet.com/politica-privacidad