Síndrome de Sjögren: un trastorno autoinmune

  • El diagnóstico temprano es importante para iniciar el tratamiento y gestionar las complicaciones.
  • Existen diversos factores que pueden activar o desencadenarlo, como infecciones o el uso de ciertos medicamentos.
persona con ojos rojos a causa del síndrome de Sjogren

El Síndrome de Sjögren es una enfermedad autoinmune crónica que afecta principalmente las glándulas que producen lágrimas y saliva, causando síntomas como sequedad en la boca y los ojos. 

Se trata de una enfermedad compleja y heterogénea que sufren entre 400.000 y 3 millones de personas en todo el mundo. Comprender la naturaleza de la enfermedad, sus tipos y la variabilidad en su gravedad es crucial para un diagnóstico preciso y un manejo adecuado.

¿Qué es el síndrome de Sjögren?

Es una patología autoinmune en la que el sistema inmunológico ataca las glándulas exocrinas, encargadas de producir saliva y lágrimas. Esta respuesta inmune anormal provoca sequedad en la boca y los ojos, siendo estos síntomas los más característicos. Sin embargo, la enfermedad de Sjögren puede afectar otras partes del cuerpo, incluyendo articulaciones, pulmones, riñones y nervios.

No se debe generalizar diciendo que el síndrome de Sjögren es grave, ya que la enfermedad puede variar significativamente de una persona a otra y depende de varios factores. Entre ellos se encuentra la presencia de otras patologías autoinmunes, la edad del paciente y la detección temprana de la enfermedad. Algunos aspectos clave sobre la gravedad son:

  • Complicaciones sistémicas. En casos más graves puede afectar órganos y tejidos más allá de las glándulas exocrinas. La afectación sistémica puede dar lugar a complicaciones como enfermedades pulmonares, renales o neurológicas.
  • Impacto en la calidad de vida. La sequedad crónica en ojos y boca puede tener un impacto negativo. Puede causar fatiga, dolor articular y muscular y aumentar el riesgo de infecciones en las vías respiratorias.
  • Riesgo de linfoma. En casos más severos, los pacientes tienen un ligero aumento en el riesgo de desarrollar linfoma. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la mayoría de las personas con la enfermedad no desarrollan esta complicación.

Tipos de síndrome de Sjögren

Existen dos tipos de síndrome de Sjögren o síndrome seco: 

  • Sjögren primario. Ocurre cuando la enfermedad se presenta de manera independiente, sin estar asociada a otras patologías autoinmunes. Representa la mayoría de los casos y se caracteriza por afectar predominantemente las glándulas salivales y lagrimales.
  • Sjögren secundario. Cuando se desarrolla en combinación con otras enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide o el lupus. La presencia de otras afecciones puede complicar el cuadro clínico y aumentar la gravedad de los síntomas.

Síntomas de una enfermedad autoinmune

El Síndrome de Sjögren presenta una variedad de síntomas que pueden cambiar en intensidad y afectar diferentes sistemas del cuerpo. Los más característicos son la sequedad en la boca y los ojos, que se producen como consecuencia de la reducción de la cantidad de saliva y de lágrimas en los ojos.

  • La xerostomía o sequedad en la boca se debe a la afectación de las glándulas salivales, lo que reduce la producción de saliva. La falta de lubricación puede provocar dificultades en la deglución, problemas en el habla y un mayor riesgo de caries dental. 
  • La xeroftalmia o sequedad en los ojos es otro síntoma común. Las glándulas lagrimales se ven afectadas, resultando en una disminución de la producción de lágrimas. Esto puede causar irritación ocular, sensación de cuerpo extraño, y en casos más severos, afectar la visión.

Otros síntomas a tener en cuenta son:

  • Fatiga persistente que no mejora con el descanso. Puede afectar significativamente la calidad de vida y la capacidad para llevar a cabo actividades diarias.
  • Dolor articular y muscular. Pueden variar en intensidad y ubicación, afectando la movilidad y la comodidad física.
  • Problemas respiratorios. La afectación de las glándulas en el sistema respiratorio puede resultar en sequedad en la nariz y la garganta, lo que conduce a problemas respiratorios, especialmente durante la noche.
  • Problemas en la piel y las mucosas. La sequedad puede extenderse a la piel y a las mucosas, causando sequedad cutánea y en las áreas genitales. Esto puede resultar en irritación y molestias.
  •  Problemas gastrointestinales. Algunos pacientes pueden experimentar síntomas digestivos en el síndrome de Sjögren, como dificultades en la digestión y problemas para tragar.
  • Dolor al mantener relaciones sexuales, picor e infecciones recurrentes. 

También se pueden dar síntomas menos comunes como la neuropatía periférica, que implica daño a los nervios fuera del cerebro y la médula espinal, o fiebre y malestar general.

Complicaciones asociadas y consecuencias del síndrome de Sjögren 

El Síndrome de Sjögren presenta consecuencias que van más allá de la sequedad en ojos y boca, impactando la calidad de vida de quienes lo padecen. Las principales son: 

  • Sequedad crónica y dolor. La falta de saliva puede afectar la capacidad para hablar y comer, y la sequedad ocular puede causar irritación y visión borrosa. Además, algunos pacientes experimentan dolor articular y muscular, contribuyendo a la carga física y emocional.
  • Complicaciones oculares. La sequedad ocular crónica puede dar lugar a complicaciones oculares más graves, como úlceras corneales e infecciones. La falta de lubricación adecuada puede afectar la calidad de la visión y aumentar el riesgo de daño a la córnea.
  •  Problemas dentales. La disminución de la producción de saliva puede contribuir a problemas dentales, como caries y enfermedad periodontal. 
  • Fatiga y debilidad. La fatiga es común y puede ser debilitante. La carga continua de la enfermedad, junto con el impacto en la calidad del sueño, contribuye significativamente a la fatiga persistente.
  • Afectación sistémica. Puede incluir problemas pulmonares, renales o neurológicos, aunque estas complicaciones son menos frecuentes.

Causas del síndrome de Sjögren

El Síndrome de Sjögren es una enfermedad autoinmune en la cual el sistema inmunológico, de manera incorrecta, dirige sus ataques hacia las células y tejidos propios del cuerpo. Existen diversos factores que pueden activar o desencadenarlo, como infecciones o el uso de ciertos medicamentos. También existen causas emocionales del síndrome de Sjögren y la presencia de otras condiciones médicas. Estos elementos, junto con una predisposición genética, crean las condiciones para la manifestación de la enfermedad.

Aunque las causas exactas no se comprenden completamente, diversos factores de riesgo pueden contribuir al desarrollo de esta enfermedad autoinmune. Los principales son: 

  • Sexo y edad. Alrededor del 90% de los casos son diagnosticados en mujeres, generalmente entre las edades de 40 y 60 años. Sin embargo, la enfermedad puede afectar a personas de cualquier edad, incluyendo a hombres.
  • Antecedentes familiares. Si hay antecedentes familiares de la enfermedad o de otras enfermedades autoinmunes, como lupus o artritis reumatoide, el riesgo puede aumentar. Es decir, no se puede afirmar que el síndrome de Sjögren es hereditario, pero es más frecuente en personas con familiares que también tienen otras enfermedades autoinmunes o del tejido conectivo.
  • Sexualidad y hormonas. La prevalencia más alta en mujeres sugiere una posible relación con las hormonas sexuales. 
  • Infecciones virales. Algunas infecciones virales, como el virus de Epstein-Barr, han sido asociadas con un mayor riesgo. 
  • Factores ambientales. Exposiciones ambientales a ciertos químicos o a la radiación han sido investigadas como posibles factores de riesgo. 
  • Alteraciones en las células epiteliales. Las células epiteliales que recubren las glándulas exocrinas pueden experimentar alteraciones en esta patología, desencadenando la respuesta inmunológica.
  • Desequilibrios en el sistema inmunológico, como la presencia de autoanticuerpos, son comunes. Los autoanticuerpos atacan tejidos propios del cuerpo, contribuyendo a la destrucción de las glándulas exocrinas.

Diagnóstico de Sjögren

El diagnóstico temprano es crucial para iniciar el tratamiento adecuado y gestionar las complicaciones de manera efectiva.

  • Evaluación de síntomas y antecedentes médicos. 
  • Pruebas de función salival y lagrimal. La prueba de Schirmer para los ojos y la prueba de estimulación salival pueden proporcionar datos objetivos sobre la función de las glándulas exocrinas.
  • Análisis de sangre. Se realizan análisis de sangre para detectar la presencia de autoanticuerpos, como los anticuerpos anti-SSA (Ro) y anti-SSB (La), que son comunes en este síndrome. La positividad de estos autoanticuerpos es una indicación importante.
  • Biopsia de glándulas salivales menores para evaluar la presencia de inflamación característica. 
  • Exámenes de imagen. Imágenes como la resonancia magnética (RM) pueden ayudar a evaluar la inflamación de las glándulas salivales y confirmar el diagnóstico.

Tratamiento del síndrome de Sjögren

El manejo implica una combinación de nuevos tratamientos del síndrome de Sjögren médico, atendiendo a las complicaciones y estrategias de alivio de síntomas. Deben combinar: 

  • Hidratación y lubricación. El consumo adecuado de agua es esencial para contrarrestar la sequedad en la boca. Además, el uso de lágrimas artificiales y geles lubricantes puede aliviar la sequedad ocular.
  • Medicamentos inmunosupresores. En casos más graves, se pueden recetar estos fármacos para reducir la respuesta inmunológica y la inflamación.
  • Medicamentos para estimular la producción de saliva. Pilocarpina y cevimelina son medicamentos que pueden ayudar a estimular la producción de saliva.
  • Antiinflamatorios no esteroides (AINEs). AINEs como el ibuprofeno pueden ayudar a aliviar el dolor articular y muscular.
  • Enfoque multidisciplinario. La colaboración entre reumatólogos, oftalmólogos y otros especialistas es crucial para un tratamiento integral.

Remedios caseros y consejos de autocuidado

Algunos remedios caseros son: 

  • Humidificadores. Su uso puede ayudar a mantener la humedad en el ambiente y aliviar la sequedad.
  • Cuidado de la piel. La hidratación regular de la piel y los ojos puede mitigar la sequedad cutánea.
  • Evitar factores desencadenantes. Evitar el humo del tabaco y entornos con poca humedad puede reducir la irritación.
  • Dieta saludable. Una dieta balanceada y rica en ácidos grasos omega-3 puede tener beneficios antiinflamatorios.

Esperanza de vida y calidad de vida

La esperanza de vida en el Síndrome de Sjögren generalmente no se ve significativamente reducida, pero la gravedad de la enfermedad puede influir. La adaptación a la enfermedad y el apoyo psicológico son componentes importantes para enfrentar los desafíos emocionales.

La investigación activa busca entender mejor los mecanismos subyacentes y desarrollar tratamientos más efectivos. Terapias emergentes, como la terapia génica y la inmunoterapia, están siendo investigadas.

Si crees que puedes tener el síndrome de Sjögren te recomendamos que acudas a un reumatólogo que te ayude a identificar lo que te ocurre. En SaludOnNet contamos con especialistas dispuestos a ayudarte, sin esperas y a unos precios muy asequibles.

Servicios médicos relacionados

Artículos relacionados

¿Te has quedado con dudas?

Pregunta a los mejores especialistas médicos

Y tú, ¿qué opinas?

Te informamos de que solo utilizaremos tus datos para enviarte las actualizaciones que se produzcan en los comentarios de post.

Puedes ejercer tus derechos de acceso, rectificación, supresión, limitación u oposición al tratamiento de datos y portabilidad en materia de protección de datos en la dirección de correo electrónico dpo@saludonnet.com tal y como se detalla en la “Información Adicional”, que podrá ser consultada en https://www.saludonnet.com/politica-privacidad

Newsletter
¿Cómo quieres contactar con este especialista?

Esto se cerrará en 0 segundos